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Historias de impacto

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JONA

Decidida a construir un futuro mejor, Jona se postuló a Habitat for Humanity Monterey Bay. Cuando fue seleccionada, se sintió abrumada de gratitud.

Mediante las horas de trabajo voluntario, Jona descubrió nuevas competencias y confianza trabajando junto al personal y voluntarios en los sitios de construcción. ““Al principio fue abrumador, pero una vez que me metí, me sentí empoderada. Aprender a usar herramientas y ver el progreso de primera mano fue increíble”, dijo.

Su nueva casa de Habitat tiene tres dormitorios y el espacio que tanto necesitaban. Para Jona, el mayor cambio es saber que su familia finalmente tendrá un lugar permanente y seguro al que llamar propio — una verdadera casa donde puedan crear recuerdos, construir una comunidad e incluso tener un perro de familia. “Estoy muy agradecida por esta oportunidad, por el proceso y por todos los involucrados: donantes, personal y voluntarios. Nos han dado esperanza y un futuro”.

SIERRA Y TAJ

Taj y Sierra tienen raíces profundas en Santa Cruz, donde Taj es un líder local, artista y DJ, y Sierra enseña tercer grado en el programa de Inmersión Dual en DeLaveaga Elementary.

 

Antes de asociarse con Habitat, vivían en malas condiciones de alquiler y temían tener que dejar su querida comunidad.

Gracias a Habitat y a su arduo trabajo, ahora tienen una casa segura y estable para construir raíces duraderas. “Estábamos encantados de construir nuestra comunidad aquí”, compartieron, emocionados por un futuro lleno de esperanza.

 

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BRIAN Y VERONICA

Verónica, Brian y su hijo Santi han encontrado una estabilidad duradera en su nueva vivienda de Habitat, un lugar que finalmente cubre las necesidades de Brian y le da a su familia la seguridad que tanto  anhelaban.

 

Brian, residente de toda la vida en Santa Cruz, quedó cuadripléjico después de un accidente de surf. Cuando el propietario vendió la casa adaptada para ADA donde vivían, se vieron obligados a mudarse a una vivienda que no cubría sus necesidades.

 “Uno de mis mayores temores después del accidente era tener que dejar el sistema de apoyo de Brian”, compartió Verónica. Ahora, tienen una vivienda estable, accesible y en el lugar que aman.

SARAH

Sarah Cooper, una dedicada maestra de educación especial y residente de toda la vida en Santa Cruz, nunca pensó que ser propietaria de una casa fuera posible. Pero gracias al préstamo para compradores de primera vivienda de CalHome de Habitat for Humanity Monterey Bay, pudo comprar su propia casa.

 

Sarah logró lo que muchos en su situación solo sueñan: comprar una casa mucho antes de la edad promedio de 49 años para compradores de primera vivienda en California.

Sarah está aliviada de poder vivir en la comunidad que ama. “Estoy muy agradecida con Habitat por este programa”.

 

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RACHEL Y MARK

El programa para compradores de primera vivienda de CalHome de Habitat for Humanity Monterey Bay permitió a Rachel y Mark Gerber asegurar un mayor pago inicial en su primera casa: una vivienda unifamiliar de 3 dormitorios y 1.5 baños.

 

Su sueño de ser propietarios en el condado de Santa Cruz se hizo realidad y CalHome les permitió obtener una hipoteca asequible y quedarse en la comunidad que aman.

Rachel lo llamó “un verdadero sueño”. Su vivienda definitiva les da estabilidad, seguridad y esperanza para un futuro brillante en Santa Cruz.

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